Voz de Dios en el silencio....
Algunas repicaron hasta el cansancio
Por las campanas de Monclova detente pergrino y pregunta el por que de estas
campanas sin vibración, sin hálito, sin eco. Contemplalas heráticas y uniciosas,
duerme en sus gritos rotos en el murmullo del viento. Testigos de una historia
de añoranzas, eran la voz de Dios en el
silencio.
Fray Gerónimo Verduzco.
Zócalo Monclova/ Lety Espinoza
Parafraseando al misionero guadalupano Adolfo Fermín Parra González, el sentido religioso de las campanas significa: “la voz de Dios que llama al hombre al encuentro de la iglesia”.
Sinembargo, en Monclova las campnas no solamente se utilizaron para convocar a la feligresía al acto religioso de la misa, puesto que según el señor Héctor Manel Rodríguez las campanas fueron una especie de reloj para la población.
Por medio de los llamados a misa la gente podía escuchar las campanas de 7, 12 y 6 de la tarde.
Con el crecimiento de Monclova el toque de las campanas de la iglesia Santiago Apóstol se perdió, como todo sonido que se esfuma en el viento, pero en el centro de la ciudad los toques aún se escuchan claramente.
Las campanas calladas, así como las que ahora nos invaden con su sonoridad albergan una historia de esfuerzo y amor por parte de muchos forjadores Monclovenses, quienes lucharon para que los llamados angeles metálicos sigan cumpliendo la labor que Dios les encomendó.