martes, 6 de noviembre de 2007

De la mano...



Las dos recorríamos aquellos patios enormes, bajábamos rápidamente por las escaleras, nos escapábamos de clase, y al final siempre nos tomábamos de las manos como dos buenas cómplices. Seguíamos vagando por los salones o los pasillos de la mano, hasta que a ella le sudaba y era tiempo de soltarnos, no se en qué momento del tiempo nuestras manos llegaron a unirse y en cuál segundo se separaron aún más.

El punto es que siempre nos recordamos, recientemente no coincidíamos mucho, uno de éstos últimos cumpleaños se fue antes de que yo pudiera llegar, sin embargo, al recibir su detalle y una notita húmeda por el sudor de sus manos supe que era ella.

Y bueno... Atrás quedó el tiempo de las ilusiones, de los juegos, de las chiflasones, eso se supone... Lo cierto es que la vida nos cambia en un abrir y cerrar de ojos y es justificable que no lo asimilemos y que tratemos de opinar e intervenir para que la vida se detenga, pero es imposible, en fin...

Después de 7 o 6 meses de trabajar en mi mente y de haber llorado un día o dos o tres por la vida, sí, por la vida de ella que cambiaba, por la vida que venía, por el nerviosismo, por mí nerviosismo, por mi falta de juicio, por mi egoísmo, por mis miedos que no son sus miedos, ya... estoy libre! estoy feliz! viene la paz!

Ironías de la vida, las dos volvimos al mismo lugar en que crecimos... Y ahora ella no viene sola, ahora todos esperamos con ansia su nueva acompañante.

Las dibujo, e imagino que será una pequeña de ojos claros y enorme pelo rizado y que caminarán mucho, mucho de la mano...

Renata y Julia las quiero...




Lety Espinoza

1 comentario:

Cyn dijo...

ahhh no manches, me hiciste llorar y hoy que ando tan sensible...

Las cosas cambian y ahora esa enorme luz, esa esperanza iluminará no sólo la vida de ella, también la de todos nosotros...

La imagen está bien padree, abrazos amiga y me alegra mucho leer esto, después de todo el proceso por el que todas tuvimos que pasar.

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